¡Ahoy, jóvenes marineros! Crédito: Yacht Club JPSeattle. Hoy, aprenderemos cómo podemos mantener a salvo tu barco del insidioso óxido. Pero el óxido no es una palabra, es el nombre de un gran problema que puede aparecer en los barcos. Bueno, ves, un barco tiene muchas partes metálicas que siempre están mojadas con agua y aire oxigenado. Si el metal está expuesto al clima durante mucho tiempo, comienza a oxidarse. El óxido debilita tanto el barco que ya no podría navegar. ¡Pero no te preocupes! Existe un súper héroe que viene en rescate de tu barco del óxido — se llama ánodo sacrificado.
¿Un ánodo sacrificado qué? — Tú (¡No te preocupes, te lo explicaré!).. {Un ánodo sacrificado es solo un pequeño trozo de hierro que se ata a las barras de refuerzo. El pequeño trozo de metal ha sido diseñado para parecer acero que se oxida mucho más rápido que el metal estructural de tu barco. También pueden estar compuestos de metales como el zinc o el aluminio. El ánodo que se 'morirá' si se deja sin atención, oxida felizmente cuando el barco está en el agua, lo cual no deja mucho para que sea consumido. Este proceso único no solo protege tu barco, sino que también asegura que el ánodo haga el TRABAJO DURO en lugar de acumularse en áreas críticas!
Así que en este punto, podrías estar pensando cómo la ánoda puede ayudar a tu barco. Permite que la ánoda se oxide para que las partes metálicas de tu barco no lo hagan. Mantiene los componentes metálicos en tu barco alejados de debilitarse y más duraderos por más tiempo. Las partes correctas, el timón y otras piezas bajo el agua se mantienen en mejor estado al tener menos acumulación sobre ellas. Si mantienes estas áreas, tu barco estará en buen estado durante muchos años venideros y no requerirá tantas reparaciones ni reemplazos de partes. Lo cual ahorrará mucho tiempo y angustia en poco tiempo.
Ahora, hablemos de algo que todos preferirían poseer: dinero. Las reparaciones y mantenimiento del barco pueden ser costosos y consumir mucho tiempo. Por eso es tan importante evitar que la oxidación comience desde un principio. Esos números pueden sumarse rápidamente a costos de capital y operativos. En otras palabras, más tiempo disfrutando de días divertidos en tu barco navegando mares altos, quemado por el sol y completamente protegido sin daños ni costos relacionados.
Aún así, es importante tener en cuenta que no cualquier ánodo servirá como los demás ánodos. Primero tienes que decidir cuál es la adición correcta para tu barco. El tipo de agua determina qué tipo de ánodo se instala. Por ejemplo, el agua salada es peor que el agua dulce porque crea más óxido, por lo que se usa un tipo de ánodo diferente para cada variedad. Mantener a tu barco protegido es vital y quieres hacerlo bien. Además, verifica e/ó reemplaza tu ánodo desgastado con frecuencia para asegurarte de que no tendrás problemas la próxima vez que saques tu barco.